2011-12-09

2ª oportunidad a Spotify

En este blog hemos sido bastante críticos con las políticas de empresa de Spotify y así lo podéis leer aquí, aquí y  sobre todo aquí

Sin embargo, por todos es sabido que en este blog somo bastante chaqueteros y cambiamos de opinión a menudo. Pero es que el mundo de la informática avanza muy rápido y haciendo eses. No nos gustaron los cambios de cuentas y la pérdidada de privilegios para los usuarios free que llevábamos en Spotify desde la primera beta, cuando pudimos colarnos sin invitación por un error en el servidor de admisión.
La noticia que me ha hecho cambiar de opinión, parcialmente, es la del anuncio de la aplicación nativa de Spotify para Linux. O yo me he despistado muchísimo o esta noticia ha pasado totalmente desapercibida para todos los blogs de Linux excepto para omgubuntu.co.uk, mi fuente. Y por supuesto no estamos hablando del viejo cliente de Spotify, sino de la última actualización que acepta cuentas free, que parece además, que han vuelto a recibir los privilegios perdidos.
La aplicación de Spotify es algo buggy pero se deja escuchar. De hecho se escucha mejor que cualquier reproductor de música que haya probado, seguramente por alguna ecualización automática pero el caso es que sin cambiar nada, las canciones en stream se oyen mejor que mis mp3s a 320kb/s. Tendré que hacer pruebas con ACC y Flac para comprobar la calidad real del audio de Spotify.
Otro punto a favor de Spotify es la integración con el applet de sonido de Unity. Entre los puntos negativos están que se ha desarrollado en Qt (no hace falta que me matéis, no me gusta Qt con gnome y punto). Además, el acceso a los archivos locales falla. Supongo que sea por algún tipo de conversión o emulación de formatos pero seguro que lo arreglan en breve. Por último debo señalar que la sincronización con iPod (todavía no lo he probado pero estoy seguro) no funciona y eso no va a tener solución a corto plazo.
Están disponibles unos deb. para x86 y x86-64 en los repositorios de Spotify.
La conclusión final es que hay que dar otra oportunidad a Spotify porque parece que ha aprendido de sus errores y ha rectificado. Eso se debería recompensar con nuestro apoyo aunque si mañana vuelven a tomar otra decisión que nos parezca errrónea, vamos a lanzarnos a su yugular como lobos hambrientos.